Toda noche especial, según Malú, merecía un baño de agua
caliente. El vapor convertía la habitación en un auténtico bosque de niebla. El
espejo había quedado empañado, al igual que la pequeña ventana, muy cerca del
techo. Apenas se visualizaba nada. Ni siquiera la veía a ella, que estaba a
medio metro de mí, pegada al borde de la bañera. Tenía la cabeza echada hacia
atrás, de forma que sobresalía. Sus ojos estaban completamente cerrados. Su
cuerpo respiraba y espiraba. Mis piernas se mezclaban con las suyas en el
fondo. Una leve sonrisa se nos escapaba cuando nos rozábamos. Me sentía como en
el edén. ¿Qué más podía pedir en ese instante? Una paz enorme rodeaba nuestro
ambiente. Y una vez más, el resto de mortales y el mundo desaparecían para
quedarnos a las dos solas. Levantó la cabeza levemente, al mismo tiempo que
entreabría los ojos.
-Qué bien se está. -dijo con la voz algo quebrada. -no
saldría de aquí por nada.
-¿Ni aunque hubiese un pastel de chocolate en la cocina?
-pregunté con una sonrisilla. Abrió los ojos como platos.
-¿¿CHOCOLATE DÓNDE??
-Eres una glotona. -reí.
-Y tú una mentirosa. Pues ahora vas a comprarlo. -me
salpicó. Yo negué con la cabeza y solté un vago "no tienes remedio".
-venga. -levantó mis piernas y las puso sobre el borde, haciéndome resbalar. El
agua me cubrió. Me ayudé con las manos para salir. Tosí por el ahogamiento
mientras Malú se reía sin consideración alguna.
-No llevo ni una noche viviendo contigo y ya me vas a matar.
-dije con los ojos rojos.
-Te voy a matar de amor, ven aquí. -tiró de mis brazos,
tumbándome de espaldas en su pecho. Rodeó mi cintura y acarició mi barriga. Dio
un pequeño beso en mi pelo y apoyó su barbilla en él. -que yo en el fondo te
quiero, eh. -reí.
-Me quieres matar, sí. -bromeé. Entrelazamos nuestros dedos
y volvimos a quedarnos en silencio. Retornamos al paraíso, esta vez, sintiendo
su piel bajo la mía. -¿tenías pensado decirme eso en el concierto?
-No, no en el concierto… pensaba decírtelo cuando vieras las
llaves de casa. Pero no aguanté más, ya sabes cómo soy de impulsiva.
-Bueno, ya estaremos en todos los programas de televisión…
-murmuré entre risas.
-Somos TT. -me dijo. Me giré impresionada para mirarla.
Asintió. -me lo ha chivado Vero. Almohadilla boda Malú. -dijo todo seguido.
-Qué cotilla la gente, oye. -comenté.
-Anda, no te quejes que nosotras somos las primeras.
-reímos.
Quién sabe qué pasará con los planes de boda, nuestra vida
en pareja, su carrera, la mía. Había tantas cosas por descubrir, por vivir, que
pondría el acelerador del tiempo ahora mismo. Tenía muchísimas ganas de todo.
De aprender cosas nuevas, de visitar nuevos lugares, de encontrar nuevos retos,
de conocer a más gente. Me sentía intrigada por el mañana. Cómo serían las
cosas dentro de unos años. Lo que yo solo deseaba era que la persona que se
encontraba bajo mi cuerpo, protegiéndome en sus brazos, fuera con la que despertase
en cada amanecer, con la que compartiese cada desayuno, almuerzo y cena. Quería
que fuese esa chica que me alegrara las mañanas, las tardes y las noches.
Aquella a la que confiase todos mis secretos y mis verdades. Esa mujer que
estuviese conmigo en mis mejores y en mis peores momentos. Y a pintar, por qué
no, el árbol de nuestra familia. Llenar las paredes de fotos, tener los pasillos
llenos de huelas dactilares con tempera, crear una nueva generación. ¿Por qué
no soñar? ¿por qué no imaginar?
Nadie puede predecir qué pasará. Nosotros somos los dueños
de nuestro destino. Hagamos lo que queramos, cumplamos nuestras metas y
labremos nuestra vida. Esa vida que siempre hemos querido tener. Si he
conseguido sacar mi disco, ¿por qué no podría cumplir mis siguientes objetivos?
¿Quién me lo podría impedir? ¿Qué me podría frenar? Nada podía arrancarme la
felicidad. Ya había sufrido bastante, ahora llegaba lo bueno. Ahora tocaba ser
la afortunada. La que gozara y divirtiera como nunca. Aunque ya era
infinitamente feliz, no hay que ser conformista. Hay que aspirar más allá. Yo quería
desafiarme. Conseguir rozar el universo con mis propios dedos. Yo quería la
alegría, el éxtasis, el agrado, la satisfacción, la placidez. Y cómo no, ella
venía conmigo. La arrastraría allá donde fuera. Siempre conmigo, siempre con
ella.
"Gracias a todos los que habéis leído la novela. Personas que me acompañaron desde el primer capítulo hasta el último, otras que se incorporaron por la mitad, y otras, que de forma completamente loca, se engancharon a la trama y se leyeron la novela en dos días. Pasaron horas y horas pegados a la pantalla siguiendo con intriga la historia de Marina y Malú. Gracias a todos los que después de leer cada nuevo capítulo, dejáis vuestro comentario, vuestro RT, vuestro fav. Gracias a los que la habéis compartido, añadiendo nuevos lectores a ella. Sumándolos a la cadena. Deciros que esto no es el final, ni mucho menos, es el comienzo de una nueva parte. Habéis leído, que digo, vivido, en la carne de Marina, su historia y el principio de su vida. Pronto habrá más, anuncio así, una segunda temporada en la que habrá más drama, más amor, más pasión. A estas dos cantantes les quedan muchas cosas que pasar... ¡¡No sabéis cuántas!! Espero volver a engancharos, a robaros vuestro tiempo para encarnaros en un personaje y haceros olvidar un poco del mundo. Espero, de verdad, que sigáis de nuevo conmigo."
Quiero mandarle saludos a determinadas personas que me ayudaron muchísimo durante el curso de mi novela. Es un enorme trabajo que, a veces, requiere consejos y opiniones para saber si realmente lo estás haciendo bien. Esto va por mi hermana y Lidia, que leían lo escrito, en ocasiones, antes de ser subido. Que gracias a una estúpida idea o una frase, ponían mi mente en marcha y sacaba algo de ahí. A Marina, que le dio nombre al personaje principal y que apostó por la novela incluso antes de escribir el primer capítulo. A mi grupo de maluleras, las cuales se enteran de las novedades y disfrutan de adelantos exclusivos. Con las que me evado de vez en cuando y paso ratos divertidísimos. A Yolanda, por su distribución y sabios consejos. A Isabel, que devoró las páginas sin pestañear, y me ha dado esta grandísima idea de escribir la segunda temporada. Y a todos los que me escribís por privado, me buscáis, me preguntáis cuándo subo desesperadamente.
¡¡HASTA MUY PRONTO!!